Beethoven / Von Weber / Rosauro 13/06/17

Juan Arturo Brennan | Tlaqná
Obertura Oberon - Carl Maria Von Weber / Concierto para marimba n.° 2 - Ney Rosauro / Sinfonia n.°4 - Ludwig van Beethoven

Ludwig van Beethoven
Sinfonía No. 4, Op. 60
Los años 1804 y 1805 fueron un periodo difícil para Ludwig van Beethoven (1770-1827) por diversas razones, entre las que se puede citar el pobre recibimiento de su ópera Fidelio y el deterioro de la relación con su hermano Karl. El príncipe austriaco Lichnowsky, mecenas de Beethoven, le convenció en 1806 de acompañarlo a su residencia de verano, en la ciudad de Grätz, para descansar y recuperar la salud. Ahí se encontró con otro conocido mecenas musical y vecino de Lichnowsky, el Conde Franz von Oppersdorff. Después de que Beethoven abandonara airadamente el castillo de su anfitrión tras tener un altercado con él por diferencias políticas, Oppersdorff le ofreció alojamiento. En su castillo, Oppersdorff mantenía una pequeña orquesta a su servicio, que a la llegada de Beethoven interpretó para él su Segunda Sinfonía. Decidió entonces Oppersdorff encargarle una nueva sinfonía -la Cuarta-, por la que pagó al autor la generosa suma de 500 florines, a cambio de concederle la exclusividad de la obra por seis meses. Tan complacido quedó el noble con el encargo que al año siguiente encargó otra sinfonía, la Quinta, que Beethoven le llevó en 1808.
Algunas fuentes aseguran que tanto la Sinfonía No. 4 como otras obras compuestas por Beethoven en esta época fueron inspiradas por la Condesa Therese de Brunswick, de quien el compositor se había enamorado perdidamente después de su dolorosa ruptura con Josephine, hermana de ésta, a quien había propuesto matrimonio sin éxito alguno, debido a los convencionalismos sociales de la época. La Sinfonía No. 4 se estrenó en febrero de 1807 en el palacio del príncipe Lobkowitz durante un concierto privado, y se presentó públicamente el 15 de noviembre del mismo año, en el Burgtheater de Viena.

Carl Maria von Weber
Obertura Oberon
En 1826, Carl Maria von Weber (1786-1826) escribió su última obra: la ópera Oberon. Weber fue un destacado compositor alemán y uno de los principales responsables de dar forma a la ópera alemana del romanticismo. Sus obras serían grandes fuentes de inspiración para compositores como Giacomo Meyerbeer o Richard Wagner. A mediados de 1824, el empresario Charles Kembre, quien era administrador del Teatro Covent Garden de Londres, decidió invitar a Weber para dirigir una temporada de ópera y escribir dos nuevas obras para ser estrenadas ahí. Tiempo atrás, Weber había sido diagnosticado con tuberculosis y la lucrativa oferta de ir a Londres significaba dejar a su familia algún medio de subsistencia por si la muerte le llegaba prematuramente. Se trataba de su primer encargo en lengua inglesa, por lo que se vio obligado a tomar lecciones de este idioma para lograr una mayor cohesión entre el texto y la música. Sin prestar atención a las recomendaciones médicas, y con una salud que se deterioraba cada vez más, Weber partió a Londres en 1826 para cumplir con los compromisos adquiridos. La obertura fue terminada en tan sólo tres días, apenas a tiempo para el estreno, que tuvo lugar el 12 de abril de 1826 en el Covent Garden. La ópera fue un éxito, pero el intenso trabajo produjo severos daños en la salud de Weber, quien murió en Londres pocas semanas después del estreno.

Ney Rosauro
Concierto para marimba No. 2
Ney Rosauro (1952) es uno de los percusionistas más importantes en la actualidad. Originario de Rio de Janeiro, Brasil, ha destacado también por su gran labor como compositor, particularmente en el ámbito de los instrumentos de percusión, para los que ha publicado cerca de cien obras. Su Concierto para marimba No. 2 fue compuesto en 2001 con el apoyo de la Universidad de Miami, con dedicatoria a Keiko Abe, compositora y marimbista japonesa, y una de las figuras más destacadas en el desarrollo de la marimba moderna. El concierto está conformado por tres movimientos, que Rosauro describe de la siguiente manera:
I. Agua que corre de las altas montañas tiene dos temas contrastantes y describe la manera en que el agua traza su camino, descendiendo las pendientes rocosas de la montaña.
II. Reflexiones y ensueños comienza con una cita musical de Johann Sebastian Bach y se desenvuelve en una atmósfera romántica, marcada con cierto misticismo. Posteriormente aparece un nuevo tema, en un tiempo vivo y contrastante, que sirve como motivo para un movimiento al estilo de una fuga, que se desarrolla antes del regreso del tema principal.
III. Caminando por las nubes tiene un ritmo vivo, aunque su melodía suave y su estructura rítmica en una métrica de 5/4 buscan evocar la imagen de Abe descendiendo de las nubes. La idea fugada que aparece en el segundo movimiento regresa antes de la cadencia del solista. En ella, el sonido de madera producido con los mangos de ratán de las baquetas representa la antigua tradición de los balafones africanos. Aparecen a continuación una cita de un tema de Keiko Abe y extractos de los principales temas del concierto. Luego de la reexposición de los temas principales, una coda que utiliza el mismo tema vigoroso de la Introducción concluye la obra de manera edificante.