Mozart / Beethoven 25/06/22
Nacido el 27 de enero de 1756 en Salzburgo Wolfgang Amadeus Mozart, compositor del periodo clásico, fue sumamente prolífico a pesar de su corta vida. Escribió música para todos los géneros de su época sumando en total más de 800 obras. Bautizado como Johannes Chrysostomus Wolfgangus Theophilus Mozart, murió el 5 de diciembre de 1791.
Su música es admirada por la gran belleza de sus melodías, así como la extraordinaria elegancia y riqueza en sus harmonías. Prodigio desde pequeño, compuso sus primeras obras a la edad de 5 años. A los 17, ya estaba contratado como músico oficial de la corte de Salzburgo. Con sus 35 años, y mitos e incertidumbres sobre las causas de su muerte, Mozart ha llegado a ser quizás el compositor más famoso en el genero llamado “música clásica”.
El repertorio escogido para este concierto es solo una pequeña muestra de la gran variedad y versatilidad de la obra de Mozart y sobre todo hace evidente que su genialidad nunca cedió ante la rapidez con la que escribía.
Don Giovanni
Don Giovanni es una opera en dos actos basada en el libreto del italiano Lorenzo Da Ponte. Se estrenó en Praga el 29 de octubre de 1787. Aunque categorizada como opera buffa, en realidad es un drama con elementos cómicos; un estilo fructífero para Mozart en numerosas ocasiones.
Mozart se mudó a Viena en 1781 para pasar lo que serían sus últimos 10 años de vida y esperando obtener fama y fortuna en la entonces capital musical de Europa. Pudo lograr cierta estabilidad financiera, aunque por poco tiempo. La opera era para Mozart el genero que mejor expresaba su gran potencial artístico. Aun así, durante esa época las exigencias de la corte eran muy altas y peculiares, lo cual impedía que Mozart, al sentirse limitado, pudiera conquistar al publico y triunfar libremente. Se dice entre músicos que para entender más y tocar mejor cualquier obra de Mozart, hay que pensarlas como si fueran pequeñas operas.
El libretista italiano Lorenzo Da Ponte se acercó a Mozart proponiéndole escribir la música para Las Bodas de Fígaro, siendo esta un gran éxito. Durante 1787, Mozart estaba en Praga y la estaba dirigiendo. El empresario Bondini, inmediatamente aprovechó el momento y le comisionó una nueva opera para estrenarse en otoño. Mozart contactó a Da Ponte para que hiciera nuevamente el libreto de esta nueva opera y Da Ponte inmediatamente detuvo sus trabajos para escribir el libreto de Don Giovanni, pues la idea era que se estrenara antes del regreso de Mozart a Viena.
El trabajo sobre Don Giovanni fue exhaustivo. En momentos Mozart tenía la música ya escrita antes de que la letra estuviera lista por Da Ponte. Aunque Mozart es conocido por escribir la música de manera rápida y perfecta, también se sabe que solía terminar algunas de sus obras en el día del estreno. De hecho, para la tarde del 28 de octubre aún no existía una obertura. Cuenta la anécdota que al ser cuestionado Mozart afirmó que “si existía”, apuntando a su cabeza. Esta misma tarde se sentó tras su escritorio a escribir mientras su esposa ayudaba a mantenerlo despierto leyéndole poesía y golpeándolo.
Mozart no tuvo tiempo de escribir un score así que en aquella ocasión solo hubo las partituras individuales de la orquesta. El copista debía tener todo listo para las 7 de la mañana lo cual milagrosamente logró. Para cualquier músico o compositor, el escribir las partes individuales de la orquesta con un “score mental” sería no solo un gran reto sino una gran demostración de una capacidad extraordinaria.
La obertura no contiene ningún tema de la opera. Es como si fuera un primer movimiento de una sinfonía en su estructura y material temático. Lo cual funciona excelentemente bien para poder ser ejecutada como obra sola. Al final, Mozart prepara la entrada a la opera con un gran acorde en Re mayor, siendo esta la tonalidad de la opera.
Mozart Sinfonía Concertante
La sinfonía concertante es un genero de finales del siglo XVIII para instrumentos solistas. Se origina a partir del concerto grosso del periodo barroco en donde los músicos principales de la orquesta, como el concertino y el principal de chelo, tocaban algunos solos. Durante el periodo clásico esta nueva forma de composición presenta un cambio más importante combinando el genero de concierto, donde el rol del solista ya es más definido, con la sinfonía. Es básicamente una sinfonía de tres movimientos, con estructura del concierto, y con extensas partes solistas.
La sinfonía concertante KV364 es una de las obras maestras del género e incluye un violín y una viola solista. Es curioso decir que, aunque Mozart escribió cinco conciertos para violín (existe controversia si fueron mas de cinco), pero no escribió ninguno para viola. Este es el único concierto en el cual la viola tiene un rol principal, aun a lado de otro instrumento. Este dueto concertante es muy claro en su forma estructural. Adopta la forma de Sonata-Concierto en sus típicas secciones de exposición, desarrollo y recapitulación, pero alternando los temas entre los dos instrumentos. El violín toca un tema y después la viola contesta con el mismo y muchas veces incluso con las mismas notas. En la recapitulación Mozart cambia el orden de quien empieza el tema principal, pero sigue con el mismo formato, creando realmente una igualdad de roles entre los instrumentos.
Es oportuno decir que la viola en el periodo clásico no era considerada como un instrumento de “primer nivel”, por así mencionarlo. Tal vez esta sea la razón de no crear un concierto para viola solista. Mozart incluso escribió la obra en una scordatura diferente, afinando la viola un semitono más alto, con la finalidad de ayudar a crear un sonido mas brillante. Hasta la fecha no he conocido violistas que afinen su viola de esta forma para tocar esta obra, probablemente también por el hecho de que las violas modernas poseen un gran sonido, y los instrumentistas un mayor nivel técnico aunado a que el cambiar la afinación de las cuerdas de un instrumento es un gran reto visual y auditivo. Creo que para los violistas actuales una scordatura diferente no es necesaria y se puede ejecutar la obra en scordatura normal sin mayor dificultad.
Octava sinfonía de Beethoven
Beethoven es uno de los íconos de los compositores de música de concierto universal, sus obras, su construcción son parte de su vida cotidiana, o, su vida cotidiana es parte de sus obras. En 1812 Beethoven termina su séptima sinfonía en la mayor op. 92 en abril, y para octubre termina su octava, escrita en fa mayor, op. 93, mientras componía estas obras, nuestro compositor estaba en medio de la crisis emocional con su amada inmortal. La carta de la Amada Inmortal la escribió en julio de 1812 en Karlsbad. En los casi dos siglos de la muerte de Beethoven se ha especulado de estas tres damas como su amada: Josephine von Deym (1779-1821), Bettina Brentano (1785- 1859), media hermana del esposo de Antonie Brentano (1780-1869), y esta última, (Birkenstock, apellido de soltera).
La octava sinfonía es una obra que por algunos críticos la consideran una sinfonía “menor”, tanto por duración como por contenido. Personalmente considero que esta obra mantiene un discurso musical que se desarrolla a través de ella. Los ocho primeros compases muestran un tema decidido sin la necesidad de tener una introducción. A los pocos compases nos muestra un tema rítmico con un acompañamiento de los violines segundos y violas en forte generando una tensión sonora que mantiene el pulso. En esta parte de la obra, que llamamos exposición hay un elemento en este discurso musical que lo hace con el fagot, en donde va cediendo el tiempo, como relatando una historia con sus pausas narrativas y nos deja en la expectativa, a base de un acorde que le llamamos disminuido. Dentro de este discurso sonoro, el final del desarrollo es la culminación de la reiteración del motivo principal y explota sonoramente en la reexposición. Siguiendo esta narrativa, en el segundo movimiento Allegretto scherzando, Beethoven utiliza un canon dedicado a Johann-Nepomuk Mäzael (1772-1838), el inventor, entre otras cosas , del metrónomo, la letra es solo: “ta, ta, ta, ta, ta”. Este scherzando o bromenado, es justamente eso, una broma que salió de este canon de su círculo privado y que Beethoven lo muestra al mundo. Después de presentarnos un motivo rítmico interpretado por los violines primeros, segundos y las violas, hay un pasaje de los violoncellos y contrabajos con notas muy rápidas, en donde imaginamos al propio compositor saliendo de las cortinas haciendo una trompetilla, burlándose de nosotros.
En el tercer movimiento, el minueto, combina un tema en fuerte, e inmediatamente nos muestra un tema suave interpretado por los violines primeros, mostrándonos esta ambigüedad de carácter, además que en este último tema nos lo presenta con ciertos cromatismos como apoyaturas que retardan la resolución armónica. En la parte del trío de este minueto, en donde la parte melódica la interpretan los alientos y las cuerdas medias, debemos resaltar la parte de los violoncellos , ya que en su ritmo de tresillos van desarrollando este complejo acompañamiento armónico, este pasaje es uno de los utilizados para audiciones o examen que se pide a los cellistas para integrarse a una orquesta. El cuarto movimiento es un movimiento virtuoso, tal vez como el de la segunda sinfonía en re mayor o como el de la cuarta en si bemol mayor, además de este virtuosismo, continúa este discurso sonoro, nos lleva por las tonalidades de fa mayor, la bemos mayor, do mayor, y más, utiliza el recurso de la enaormnía (misma sonido pero con nombres distintos) y cambia de armadura (tonalidad) para una mejor lectura de los ejecutantes. La utilización de la primera cuerda de violín al aire, es decir, que esa nota tiene la opción de interpretarse con digitación o libre, Beethoven nos señala en la partitura que debe ser así, generando un coloro de sonido áspero, y que además viene de un semitono que al tocarlos juntos no suena tan armónico, este es otro elemento del desarrollo del discurso musical, ya que genera tensión. En la última parte de este movimiento hay una sección de notas cortas que son interpretadas intercaladamente por alientos y cuerdas, aquí hay un momento en el que escucharemos la reminiscencia del famoso motivo de la quinta sinfonía reiteradamente por los alientos y timbal. Para terminar con este discurso sonoro, expone el motivo principal reiteradamente y lo detiene de manera abrupta, poniendo una fermata de silencio, creando esta expectativa en la narración.
En octubre de ese año Beethoven viaja a Linz, en donde vivía su hermano Nikolaus Johann, para, según él, resolver un problema moral, el cual Nikolaus resolvió casándose con su ama de llaves Therese Obermayer. Estas serían parte de la vida de nuestro compositor antes de acabar ese 1812.
Maestro Rey Alejandro Conde Valdivia
Violinista, musicólogo y director de orquesta.
Director de grupos de la DGDC UV
Xalapa, Ver.
Cuarentena de junio